
Las ciudades suelen ser como un hormiguero en el que moverse resulta una ardua tarea... incluso para los paisanos de la propia urbe. Y si la ciudad posee ya un cierto tamaño... la operación puede resultar casi imposible.
Por fortuna el hombre ha tratado de resolver estos problemas de movidad con medios de transporte colectivos... que traten de agilizar el tránsito en la medida de lo posible.
El más eficaz es sin duda el metro... el subterráneo, el metropolitano, el suburbano o como quiera que se llame. A veces sus vagones son muy viejos, pero aún así circulan con elevada frecuencia, con puntualidad exquisita y lo que es aún mejor... las indicaciones de uso son práctimente las mismas... en todos los paises y en todos los idiomas.