Caminante no hay camino


Antigua calzada de adoquines para el tránsito de carruajes... los automóviles de antaño. Y hoy nos quejamos por el más mínimo bache en la carretera.

Con ese traqueteo característico de las ruedas, generalemente de madera, al pasar de una piedra a la siguiente. El viaje era lento... pero así tenían la posibilidad de disfrutar con el paisaje.

Ahora lo que prima es la velocidad, el llegar cuanto antes... y no reparamos en los sitios por los que pasamos... eso me da pena. Hace que nos perdamos vistas magníficas, campos de cultivo, pequeños pueblos, horizontes montañosos...

Ahora sólo hay asfalto, rayas blancas y señales luminosas... ... ... ... ... ... se hace camino al andar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario